Semanas blancas.




Soy muy consciente de que hay bastantes lugares donde, este año, la llegada del invierno parece que se esté haciendo de rogar más de lo acostumbrado. En Qarpadia, en cambio, ya hemos tenido la ocasión de ver como muchas zonas quedaban cubiertas por el blanco e inmaculado manto de las primeras nieves; por mucho que una espesa y persistente neblina que desciende de las cumbres se empecine en anegar buena parte del llano.


Es un momento en que los días se suceden cortos, oscuros, fríos y desapacibles; aunque no penséis que por ello la actividad que se viene desarrollando por estas latitudes se vea, en modo alguno, ralentizada. Puede que cambie de apariencia, o se traslade a ubicaciones más propicias, pero permanece latente y alerta pese a que algunos de sus aspectos se nos puedan antojar algo más sobrios.


Además, si los días son cortos es porque las noches son largas, y ahí, amigos míos, es donde los qarpadios saben desenvolverse de manera más notable. Desenfrenadas madrugadas donde se suceden ágapes, mascaradas y todo tipo de sofisticados y tentadores festejos sazonados, inevitablemente, por aquellas perversiones que; en grado y estilo; se consideren oportunas. Todo ello deviene en preludio a los carnavales qarpadios (festejos que aquí cobran enorme relevancia aunque se les imprima un tono algo distinto al que, normalmente, suelen llevar asociado).


El invierno en Qarpadia puede considerarse; en definitiva; un tiempo de recogimiento, pero… recogimiento “relativo”, pues, si bien aquellas actividades más asociadas con el exterior pueden verse; como es lógico; un tanto atenuadas, es mucho cuanto llega a dar de sí todo aquello que acontece “de puertas adentro”, y… sin ir más lejos, mañana mismo, dejaré aquí una prueba irrefutable de los tórridos escenarios a que da pie tan (en apariencia) gélida estación.


Comentarios

  1. Es cuestión de aprovechar el instante, de dejar que lo bueno de cada momento nos inspire para sacar lo mejor de nosotros mismos y compartirlo con aquellos que trabajan en la misma sintonía. Sabes como me gusta el frío para todas aquellas actividades que se hacen mejor a cobijo de las inclemencias del tiempo y, sobretodo, para compartirlo todo contigo, satisfacerte y disfrutar a Tus pies.

    No dudo de lo que Qarpadia puede ofrecer, por ello, si me lo permites, seguiré por aquí.

    Besines dulces
    A Tus pies

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    Respuestas
    1. "Colaboración entre quienes trabajan en la misma sintonía"... un concepto muy acertado y, en la inmensa mayoría de los casos, oportuno. Y..., sino, que nos lo digan a nosotros.

      El momento y el lugar no es que carezcan de importancia, pero lo que prima; sobre todo; es el objetivo y la voluntad. Si estos no resultan coincidentes... poco puede hacerse.

      Un beso y un azote, mi dulce y "concordante" sierva.

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