Rincón de pensar.
No. No creáis que ando buscando
reprender a nadie mientras lo destierro a una oscura y lóbrega estancia a fin
de que reflexione sobre la conveniencia de sus actos. Este rincón que hoy os
propongo pretende servir de ayuda para cuando necesitemos desconectar un poco
de nosotros mismos y precisemos de un refugio frente a las preocupaciones
cotidianas y el estrés acumulado que satura nuestras mentes.
Un modo de lograrlo (que no el
único) es sustituir esos pensamientos negativos y recurrentes por otros de
signo bien distinto y…, bajo esa perspectiva, ¿qué son los libros sino
compactos contenedores de ideas y reflexiones ajenas?
Por esa razón; al menos esta vez;
voy a recurrir a un espacio no demasiado atractivo bajo un punto de vista
estrictamente estético y…, entre tanto, espero que comprendáis el significado que
intento darle: un reducto de palabras donde olvidar temporalmente nuestros
problemas, pero no dejando de pensar sino, más bien, buscando fórmulas que nos
ayuden a pensar de otro modo.
Que disfrutéis todos de una
feliz, e ilustrativa, jornada de domingo.
No es un rincón que carezca de belleza, aunque no quizás esa que todos esperan ver, pero personalmente no me agrada, y no por si mismo, sino por lo que representa, por el motivo de que esté en la ciudad...
ResponderEliminarMe entristece en cierta medida aunque sé que será de ayuda y prontito los rincones tendrán otro cariz.
Mientras seremos pacientes y pondremos de nuestra parte por acompañar a ese rincon en esas necesidades personales.
Todo de mi parte, lo tienes.
Besines dulces
A Tus pies