Negro sobre blanco.
La cita que vengo a proponeros
esta semana resulta un poco extensa y merece de ser brevemente explicada. Se trata
de un extracto de la carta que en 1519 escribiera Erasmo de Rotterdam
(Escritor, filósofo y humanista Holandés) a Ulrich von Hutten (Escritor y humanista alemán) con el
propósito de satisfacer el interés que este último le había manifestado por
conocer los detalles que daban cuenta del carácter personal de Tomás
Moro (Escritor, político y
humanista inglés).
En el fragmento que he escogido
para compartir con vosotros, se hace un velado elogio a la palabra y a la
capacidad que esta tiene (cuando está bien expresada y es bien entendida) para
generar un vínculo profundo entre las personas; pudiendo llegar incluso a prescindir,
en determinados casos, de cualquier tipo de contacto físico.
Pero, por otro lado, también viene
a establecer la excepcionalidad de este concepto, pues no es posible alcanzar
ciertos grados de complicidad cuando no existe una predisposición previa a
compartir unas ideas y valores definidos. Solo de producirse esta suerte de “conexión”
se puede llegar a disfrutar de la belleza invisible e imperecedera que se
esconde tras las apariencias.
Median ya casi cinco siglos desde
que
Erasmo pusiera por escrito estas afirmaciones, pero, a día de hoy, continúan
conservando plena validez (lo que viene a demostrar que el fondo de muchas de
las cuestiones humanas tiene un carácter invariable, y únicamente son las formas
las que sufren algún tipo de variación en función a las preferencias o las posibilidades
del momento).
Ya me diréis que os sugiere a
vosotros.
[…] es un ejemplo de lo que Platón dice de esa
sabiduría sosegada que excita mucho más el ardiente amor entre los hombres que
la más admirable belleza de la forma. No se discierne por los ojos; por lo que
aún siendo verdad lo que dijo el griego, que de la vista nacen la Simpatía y el
Amor, es posible que unas personas unidas en el más ardiente de los afectos, nunca
se hayan visto ni hablado entre sí. Y, siendo realmente una experiencia común
que por diversos motivos distintas personas se sienten atraídas por diferentes
clases de belleza, así entre una mente y otra parece haber una especie de
parentesco que hace que estemos compenetrados con unas mentes y no con otras.
No podría estar mas de acuerdo con sus reflexiones, mas eso Tu ya lo sabes, pues aunque permanecía incrédula teniendo señales varias que me llevaban a pensar que es posible sentir conexión a través de las palabras, sin conocer a esa persona ni haberla visto nunca, es bien cierto que al conocerte a Ti a través de ellas todas mis dudas se disiparon.
ResponderEliminarEmpecé a sentir cuando aun era invisible para Ti y reconocí así la capacidad tan hermosa que tenemos cuando usamos bien estas pocas letras de que disponemos, cuando damos forma y creamos sensaciones y emociones que somos capaces de compartir con quien las lee, sin que entren en juego otros sentidos, ya ni siquiera la voz, tan solo una hoja con pensamientos, sentimientos, sensaciones...
Sólo hace falta que quien escriba deje de lado sus temores y se muestre tal como es, y quien las lea sea capaz de dejar de lado sus prejuicios y estar dispuesto a sumergirse en esas letras extrañas que tienen algo que decir, algo que ofrecernos, dándonos la posibilidad de conocer a través de ellas a esa persona y, si conseguimos ahondar, algo de nosotros mismos.
Todos sabemos que hay mentes que no nos llegan, palabras que pasan ante nuestros ojos como si no fuesen para nosotros, incluso parecen escritas en una lengua extranjera, y otras en cambio, como pasa con las Tuyas, son capaces de traspasar el medio en que se hallen plasmadas e invadirte con eso que albergas y que, quieras o no, llega a inundar nuestro cuerpo y nuestra mente.
Creo que a parte de la afinidad personal que hace posible el interés abriendo las puertas de nuestra mente, hay que olvidarse de agradar, hay que superar nuestras inseguridades y simplemente ser quien somos, y de ese modo, llegaremos a través de nuestra palabra. Quien sabe hasta donde, quien sabe cuando, pero...¿acaso importa?
Todo cuanto me hubiese perdido si Tu no hubieras querido mostrarte!!!...
Tus palabras son un lujo para mi, y a la vez, siempre un desafío.
Feliz martes mi Señor
Besines dulces
A Tus pies
PD: perdón por el rollo madrugador...es que....me inspiras...
Creo que has dado en la clave de todo este asunto cuando apuntas que solo se puede albergar la esperanza de obtener determinados beneficios a través las palabras: "cuando usamos bien estas pocas letras de que disponemos".
EliminarNo resulta sencillo; sin duda; ni siempre es factible alcanzar ese grado de acercamiento y complicidad (tal y como Erasmo nos advierte), pero es posible y, lo más importante de todo, merece la pena.
Todo ello me lleva a pensar sobre lo triste que resulta que el hecho de perdérselo se deba a nuestra propia desidia y no a cuestiones que se escapan a nuestro control. De lo segundo no somos responsables, pero de lo primero sí.
Un placer servirte de inspiración, mi dulce y "versada" sierva. Justa recompensa a esa sutil influencia que también tú ejerces sobre mi.
Un beso y un azote.
Lo que Erasmo nos plasmo en letras siglos atrás se hizo carne y realidad hoy, en este siglo, con él.. conmigo... a 994 km el uno del otro, yo en el Cantábrico, él en el Mediterráneo... sus letras y las mías, su sentir y el mío hechos párrafos interminables, metiendo el alma, el corazón y la mente entre palabras, leyendo no solo las líneas sino también entre ellas, descubriendo un sentimiento tan grande como extremo, tan fuerte como profundo... Yo, sin él no soy... como no era hasta que apareció... Sentir que alguien llega como un ángel a salvarte del infierno más oscuro, que te arropa el alma y te acuna el cuerpo, que te protege del mismísimo viento... de todo lo malo... que te hace elevarte más allá del cielo cada vez que te toca en palabras, que es capaz de traspasar escudos, armaduras y murallas para tocar con la punta de los dedos el corazón y bombearlo con las manos para darle vida de nuevo... todo eso a casi 1000 km... cuando la piel roza la piel se detiene el mundo, se paran los ejes...
ResponderEliminarEs hermoso este pedacito de texto que nos traes... conocer a través de las palabras sin ser vistos antes, es empezar a amar desde dentro... querer de dentro hacia afuera... que alguien llegue de repente para tocarte el alma con sus palabras, para mirar dentro de ti cuando te lee... y paro, que esta entrada me da para escribir una exageración de mis reflexiones matutinas y más teniendo el día bajito como lo tengo.
Gracias a ti y a dana pues vuestras letras con complemento perfecto siempre... me gusta leeros a ambos.
Besinos a ambos también...
Voy a intentar yo también no extenderme demasiado, estimada Haydeé, pues me llegan a abrumar en cierto grado la ingente cantidad de paralelismos que hay entre mi propia realidad y aquella otra que se desprende de tus palabras.
EliminarSimplemente apuntar que comparto al cien por cien la forma y la esencia de tus afirmaciones y que no creo necesario ahondar más allá, pues queda claro que (en lo que se refiera a la circunstancia que nos ocupa) no por añadir más palabras vamos a entendernos mejor.
Gracias por los besos que nos brindas a los dos y recibe un fuerte y cómplice abrazo de parte de ambos.