Jueves de Comadres.
Hoy, como cada año en la noche
del jueves previo al martes de carnaval, tiene lugar en Asturias la celebración
de “les
comadres”. Aunque dicha festividad está bastante extendida por toda la
región; sobre todo de un tiempo a esta parte; es en la localidad de Pola de
Siero donde cuenta con un mayor arraigo.
En la actualidad ha venido a
derivar en un acontecimiento de carácter más bien gastronómico donde familias y
grupos de amigos se reúnen para degustar los platos típicos de esta jornada
(tradicionalmente “bollu preñau”,
sidra para beber y naranja de postre, aunque con el tiempo se han ido añadiendo
embutidos, tortilla de patata, carne empanada, e incluso, lengua de ternera
embuchada).
Pero, quizás, lo más curioso de
esta fiesta esté en sus orígenes que, por otro lado, no parecen estar demasiado
claros. Por un lado se dice que pueden derivar de ciertas reuniones de carácter
lúdico que entre mediados-finales del siglo XIX se celebraban entre los
diferentes gremios de trabajadores y artesanos en función a su sexo. Existirían
pues unas “compadres”, que habrían
ido perdiendo su vigencia hasta desaparecer, y unas “comadres”
que serían el germen de las que hoy existen.
También hay teorías sobre la
procedencia americana de esta tradición y que pudo llegar a Asturias desde la
región de Tucumán en Argentina merced a los flujos y reflujos migratorios que se
dieron entre ambas latitudes.
No deja de haber una versión
medieval acerca de que, durante estas fechas,
aquellas mujeres que solían ejercer de “celestinas” (también “comadres”,
de ahí la denominación) se aprestaban a resolver los entuertos que hubieran
podido surgir entre las parejas; ya se tratara de un matrimonio o simples
novios; para que no iniciaran el periodo de Cuaresma enemistados.
Pero, la versión sobre la
procedencia de este evento que goza de una mayor aceptación es, también, la que
más atrás se remonta en el tiempo. Se cree que las fuentes de las que bebe esta
celebración podrían estar en la fiesta romana de “las matronalias”, dedicada a la diosa Juno que era, entre otras
cosas la patrona de las mujeres embarazadas. En ese día; que se quería ver como
un intento de rememorar el mítico episodio del rapto de las sabinas; todas las
mujeres de Roma podían desprenderse de las rígidas costumbres que las mantenía
encorsetadas durante el resto del año y gozar del mismo status que los hombres.
Sea como fuere, no es Asturias el
único lugar de la península ibérica donde se dan este tipo actos. En Guipúzcoa existen celebraciones muy similares que reciben
el nombre de “Emakunde” y, en ciertas
zonas de Segovia y Zamora, también se conservan festejos de este estilo
relacionados con el día de Santa Águeda (5 de febrero).
Pero la repercusión que por estos
lares tienen “les comadres” va mucho
más allá de un mero acto festivo. Desde el año 1986, irradiando su mensaje
desde la villa de Gijón, “La Tertulia Feminista
Les Comadres” busca como acabar con
las diferencias que separan a hombres y mujeres. Es, precisamente, en la noche
de este jueves cuando hacen entrega de su premio “Comadre de Oro” a aquella
persona o entidad que, a su juicio, más haya contribuido para suprimir esas
barreras. Pero también se acuerdan de aquellos que hacen justamente
lo contrario y, para ellos, cuentan igualmente con un galardón: “el felpeyu” (piltrafa) que,
lógicamente, no resulta tan apreciado.
Como veis, muchas cosas se
entremezclan en “les comadres”, lo
sacro y lo profano, lo festivo y lo solemne, incluso lo sórdido y lo
reivindicativo.
Por suerte, ahora los chicos también
podemos disfrutar de esta fiesta, pues no ha mucho que estaba muy mal visto que
los hombres nos dejáramos ver durante el transcurso de esta velada y aquellos que
lo hacían corrían el riesgo de verse vilipendiados por todas aquellas féminas que
hasta el alba campan a sus anchas.
Aquí, en Gijón, habrá fiesta toda la noche, pero yo a la camita que mañana me levanto a las 5 ¬¬
ResponderEliminarUn besazo, y que lo disfrute quien pueda! ;)
Lo cierto es que la fecha escogida para esta celebración tiene un poquito de mala leche, la verdad. Pero bueno, siempre habrá otra oportunidad y, a fin de cuentas, el momento en sí no siempre es lo más importante.
EliminarPor cierto, suerte ante tu nuevo desafio.
Un calido abrazo.
Aquí hace muchísimo tiempo existía una tradición similar...
ResponderEliminarEl jueves antes del "dijous gras" (que era ayer) era el "dijous comares" y dos jueves antes al "dijous gras" el "dijous copares" donde se obsequiaba a madrinas y padrinos respectivamente, normalmente con productos tipicos de la matanza del cerdo, sobretodo embutidos...
Hoy en día, solo queda como tradición el "dijous gras" donde es típico comer tortilla y butifarra d'ou (de huevo) y de postre "coca de llardons" (chicharrones).
En Reus, a mediados del sigle XIX, Andreu de Bofarull da la costumbre de los jueves de comares y copares por perdida diciendo: «En el día los nombres han quedado, pero ha desaparecido la costumbre de los presentes», refiriéndose a los obsequios que se hacían...y así poco a poco se han ido perdiendo quedando solo como tradición el día de ayer...
Me gustan las coincidencias y también me gustaría poder disfrutar algún día de las diferencias...
Gracias por explicarme un poquito mas de Tu tierra que sabes que siempre me encanta...
Besitooooo
A mi lo que me resulta curiosos es el hecho de que; a pesar de lo que muchas veces tratan de hacernos creer; a poco que escarbemos, como en este caso, nos damos cuenta de las diferencias que nos pintan insalvables, ni lo son tanto ni superan al resto de las cosas que sí nos unen.
EliminarLástima que no dediquemos un poquito más de tiempo a derribar esas barreras que nos quieren imponer a la hora de intentar comprender a los demás.
Un beso y un azote.